QUERIDA MAMÁ. QUERIDO PAPÁ.

Querida Mamá,

Fuiste tú la primera en amarme, aún sin conocer mi cara, ni mis maneras. Yo creo que fue porque desde que llegué a ti, nuestros corazones latían juntos. Y ya sabes lo que dicen del corazón. También creo que me amaste primero, porque deseabas mi llegada más que nadie. ¡Qué grande amor el despegarse ciegamente de una parte del ser para crear otro! Pues soy tu carne, tu sangre y tus huesos.

Fuiste también la primera en conocerme con el espíritu, hablarme con la mirada y tocarme con el corazón. Y valientemente, fuiste la primera en saberme un préstamo del Creador para amar y hacer prosperar. Y así, fuiste la primera en mirarme a los ojos y encomendar mi cuerpo y mi espíritu al cuidado del Creador, que desde el principio me colocó en tus entrañas. Fue algo así como una combinación de afectos.

A ti te dediqué mi primera sonrisa, y desde entonces las has correspondido todas, al doble. Tu cara y tus manos me sostienen con vida y me mantienen feliz. Quiero decirte que no tengo intenciones de soltarme de ti, jamás.

Con amor incondicional,

(La futura) Miss V.

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Querido Papá,

Fue tu nombre el que dije primero y desde entonces se llenó mi corazón de ti. Eres tan grande, tan fuerte y tan valiente, que no puedo sentirme más protegida. Lo puedes todo. Lo sabes todo. Soy tu niña y tú eres mi héroe.

Fuiste también el primer hombre en mi vida, y mi primera figura de fuerza y valor. A ojos cerrados, pero con el corazón abierto, me supiste tuya desde el principio, sólo por el amor tan inmenso que le tienes a mi mamá. Porque aunque quisieras, no podrías negar que no te pertenezco, porque soy en todo igual a ti: mis ojos, mis pestañas, la forma de mis dedos, y hasta mi manera de caminar, son un duplicado de los tuyos.

Tus abrazos son mi protección y un reflejo de lo mucho que me quieres, y me obligan a entregarte mi cariño de manera tan incondicional, como lo haces tú conmigo.

A ti te dediqué mi primera palabra, y desde entonces las has apoyado todas, al doble. Tu cara y tus manos me sostienen con vida y me mantienen feliz. Quiero decirte que no tengo intenciones de soltarme de ti, jamás.

Con amor incondicional,

(La futura) Miss V.